La barbacoa es la gran protagonista de las comidas con amigos familiares o comidas de empresa. Si te toca ser el cocinero, no sufras, te damos unos consejos para convertirte en el maestro de las barbacoas. No basta al comprar carne y carbón, hay un trabajo previo que agilizar la espera y harás que tus amigos y familiares se chupen los dedos.

Pasos a seguir para cocinar la carne en las parrillas

Quantitat de carn

¿Cuántas personas vendrán a la barbacoa? Es importante saberlo por la cantidad de carne que tienes que comprar. Calcula una media de unos 350 a 400 gr. de carne por persona, entre el chorizo, el tocino, la morcilla, las alitas de pollo, medias, hamburguesas o los entrecots, el tipo de carne al gusto del consumidor. Por ejemplo, para 10 personas, serán necesarios entre 3,5-4 kg. de carne.

Las brasas perfectas

Las brasas deben estar bien encendidas, blanquecidas o grises y la parrilla no muy debe estar muy cerca de las brasas. La carne se debe hacer lentamente hasta que estén en su punto. Si no lo hacemos así, la carne se quemará demasiado por fuera y quedará cruda por dentro.

El carbón para las brasas

El carbón es la mejor opción para hacer la barbacoa, ya que las brasas duran mucho y mantienen una potencia constante. En cambio, las barbacoas de ramas o sarmientos requieren una continua alimentación para seguir fabricando brasas y se debe vigilar para evitar las llamas que podrían chamuscar la carne.

Preparación de la carne

¡Preparar la carne es el secreto para conseguir una barbacoa perfecta! Es muy importante tener la carne a temperatura ambiente por lo menos una hora antes de ponerla a las brasas. Puedes tener la carne cerca de las parrillas para que las piezas vayan sudando, pero no las pongas al fuego mientras se van haciendo las brasas.

Toda la carne al fuego

Cocinar carne a la barbacoa requiere su tiempo. Coloca las piezas en la parrilla y deja que se hagan lentamente. En las zonas más alejadas de las brasas puedes ir poniendo las próximas piezas que vayas a cocinar. No toques la carne ni le des vueltas continuamente. Deja que se vayan haciendo y dales la vuelta sólo cuando ya estén en su punto. Comienza con chorizos, tocinos y morcilla, y prepara las piezas de pollo y los pinchos. A medida que las vayas sacando, coloca las piezas más grandes, que necesitarán más tiempo.

La sal y las especies

No pongas sal a la carne antes de ponerla en la barbacoa. Es preferible salar la carne una vez esté hecha. Así la carne conservará su jugo y quedará más sabrosa. Si quieres aromatizar la carne, puedes meter alguna hierba aromática como romero o tomillo para que le den un toque a la carne.

Apagar de brasas y limpiar

Cuando termines la barbacoa, se debe apagar bien el fuego. Aunque las brasas parezcan muertas, probablemente todavía tienen calor. Si la barbacoa tiene tapa, podemos dejarla puesta para ahogar el fuego. Si no, hay que apartar el carbón y leña que no se hayan quemado y esperar a que se apaguen las brasas. Es mejor no apagar el fuego con agua. La limpieza de la parrilla es otro tema importante. Aprovechando que todavía tiene una temperatura elevada le podemos pasar un estropajo metálico para dejar como nueva, ya que caliente es mucho más fácil limpiarla.